Lola y Diego en las Canteras, imagen de un programa de TV Gran Canaria.
Ya no esperaba volverlos a ver andando por la playa de sus amores, pero un milagro, tal vez las causalidades me los mostraron ayer en pleno esplendor de salud, felices, recorriendo el tramo casi diario de costa. Fue un reportaje de la TV de Gran Canaria, una entrevista a otra persona que también falleció, lo miraba y de repente aparecieron entre la multitud, casi de la nada, paso firme, como si dos ángeles vinieran a barnizar mi tristeza, a decirme «Aquí estamos Pakillo», «No nos hemos ido del todo», «Cuenta con nosotros como siempre te ayudamos desde que naciste».
Entre mis lágrimas Diego y Lola se hicieron de nuevo presentes, como si aquel 2015 se hubiera hecho eterno, pocos años después de sus sucesivas muertes. Fue ayer un día de amenazas racistas por escribir lo que pienso de esa lacra, de repente, cuando más triste y solo me encontraba aparecen mis padres. Gracias universo por ese pequeño milagro!!!
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