«El sueño del héroe, es ser grande en todas partes y pequeño al lado de su padre.»
Víctor Hugo
Los regalos de Reyes me los hacia mi padre, su habilidad con el hierro era parte de su vida, aprendió el oficio tras salir del orfanato de los niños con familiares asesinados por el franquismo. Por eso cada enero llegaban los Magos de Oriente a un hogar empobrecido con un coche a pedales, un camión, un velero, todo tipo de artilugios o la grúa que aún conservo, juguete perfecto que todavía funciona, su elevador, la palanca para subir y bajar. Maquinaria para los sueños y fantasías, cuando no había móviles y la televisión solo tenía dos canales.
La miro y me vienen tantos recuerdos, jugar con mi padre, perdernos en los parajes mágicos de los años en que Tamaraceite no era un antro de cemento y centros comerciales, sus manos oliendo al petróleo de la limpieza tras la dura jornada, el cabrestante de la memoria.
Más historias
También la vida
80 años de la liberación de Auschwitz, el mayor campo de exterminio nazi
Godismos