
Ilustración de Miguel Brieva. Revista Cañamo.
Nos metíamos las dosis en el Parque Blanco, compartíamos las jeringuillas, porque no había pa todos, la sangre del otro se metía en tus venas como un torrente de horror, era como un intercambio de miseria, de pobreza moral, la destrucción programada por los de arriba.
Juan Felipe Morales Dieppa
«(…) Cuando la probé por primera vez me pareció que era el mayor placer que había sentido en mi puta vida, tenía 19 años, había estado con pibas, pero aquello era lo mejor, cerré los ojos y me recosté en el asiento de atrás del coche de Juan «La Mona», los demás estaban de risas, a mi me dio por dormirme y flipar, volé por todos los universos conocidos, al menos eso pensé, ni pastillas, ni hachis, ni mariguana, ni hostias me hicieron sentir aquella sensación de libertad, de que mi cuerpo ya no era mi cuerpo, sino un trozo de meteorito flotando en el universo. A los pocos meses ya estaba enganchado, me di cuenta que olía mal, que no me bañaba y que los pantalones se me caían de lo flaco que estaba, los policías seguían repartiendo en todos los barrios de Las Palmas, ya pasamos hasta de los tripis, solo queríamos a la dama blanca, todos los colegas la buscábamos cada día en Las Rehoyas, en El Polvorín, en El Risco de San Nicólas, en el Poligono Cruz de Piedra, los que la vendían eran chivatos de los maderos, tipos sin escrúpulos que solo consumían cocaína, jamás heroína, tenían la lección bien aprendida o estaban advertidos por la gente del tal Galindo, que era el que movía desde los picolos toda el plan que venía de la CIA de drogar a la juventud, canaria, vasca, gallega, catalana…, más combativa… El mismo hijo de puta que encabezaba el GAL, el mismo que ordenó la tortura y asesinato de Lasa y Zabala, de Santi Brouard, de tantos otros vascos que luchaban por su libertad. En poco tiempo se cargaron todo, yo no aparecí más por la UPC en Triana, dejé la militancia, igual que mis colegas de La Isleta, todo era miseria humana, zombies, chiquillos que eran buenísimos jugando a la pelota, hasta varios que debutaron con la UD, que acabaron como escorias vivientes, piel y hueso, el cuerpo y la mente destrozada, lo mismo que toda la gente que militaba y que luchaba contra la base de la OTAN en Arinaga, contra la militarización de Canarias, contra la mili, contra el fascismo, contra la destrucción de las islas por el turismo, contra el caciquismo fascista, ese que tenía y tiene a nuestro pueblo encadenado, arrodillado. Yo solo vivía para la dosis diaria, llegué a robarle a toda mi familia, a mi abuela querida, a mi madre las pocas joyas que tenía, el dinero que tenia guardado mi viejo, los ahorros de la estiba. Mi vida se destrozó por completo, no quedó nada de mi, solo este saco de huesos que ahora deambula por el mundo, «El Negro», Mederos, el que un día creyó en una Canarias libre e independiente, en un mundo mejor…»
Testimonio de Antonio Mederos Padrón, víctima de la heroína en los años 80-90 en la isla de Gran Canaria.
Empecé con 13 años, escapado de casa, pero nadie me busco. El Barrio era ahora mi casa, territorio. Los mayores me dejaban para que vendiera. Y así, poco a poco, refor, Carabanchel, y otra vez a lo mismo, atracar y vender. Pero con 13 años, era otra visión. No tenía ni puta idea de dónde nos metíamos, con ese
Tailandes blanco que te daba la libertad que tu necesitabas. Un día me empezó a encontrar muy mal, parábamos en una disco Hermano Lobo., en Vázquez de Mella, ayi había de todo hasta la madrugada. Total que nadie de los míos (. Chavales) me daban solución a la tiritona, vómitos, diarrea. Me quería morir. Pero llego mi colega el Tito, 3 años, más que yo, y un mes más poniéndose.
Me dijo » chico, te as puesto hoy » no !!!
Pues tu lo que tienes es un mono que te cagas. ⚡ Fue ponerme y otro Yo, apareció. ✌️
Cuando, de verdad fuy consciente, creo que tenía 35 / 40, años.
Pero ese primer Mono no se me olvidara en la vida. Hoy tengo 58 años y en mi Barrio, no queda nadie de aquel entonces. Si chavales más jóvenes que ya se engancharon a la plata.
Muchas veces me pregunto. No tengo a nadie que pueda Compartir mi vida, pasada. Era todo diferente, aquello fue una estrategia de una supuesta transición que al estado. Los fachas, frankistas de siempre. No les interesaba, jóvenes que Pensarán. Yo mismo, milite en la
C. N. T., grupos Acratas y correo del F. R. A. P,
Pero todos esos ideales se los llevo la puta
Heroina. Son las 4 de la mañana, estoy con oxígeno 12 h., al día.
Montón de pirulas y ahora mismo llorando como hacía años.
Tengo la carga viral, undetectable, bien de defensas. Me comí la movida del interferon y hasta una operación de corazón ♥ por una
Endocarditis, mal curada. Los Doc., me dicen que soy un superviviente que he tenido mucha suerte.
¿ Suerte.?
Hij@s de puta suerte. Entonces por qué, hay días que me metería un cañón del 38 en la boca y descansaria de una vez. Y pienso en todo lo que pase y que me encontraré, con el
Tito, el Facho…, etc
Me estarán esperando
Como cuando, subías al
Talego y te tenían preparado, chavolo, sábanas y hasta para quitarte el mono.
No, se ni a quien estoy escribiendo, porque en
Realidad estoy hablando Solo.
De . Buenas noches. Y perdonad la chapa.
Si es que, esto lo lee
Alguien. La verdad es que me da igual.
Hola Eugenio, un verdadero honor contar con tu comentario en este blog. Yo te leí y me erizaste la piel con tu experiencia de vida, tienes la fuerza escribirlo y relatarlo, eso no lo tiene todo el mundo, tu ejemplo ayuda a muchos jóvenes que hoy en día están coqueteando con las drogas. Agradecerte inmensamente tus palabras. Un abrazo fuerte!!